“Octopus: ocho pies para el viaje”.
Despedirse es el primer paso de todo viaje.
Que sea liviano y práctico el equipaje. No llevar más peso del que puedas cargar.
Pagar las deudas antes de partir. Recuerda que Maat, la antigua diosa de la justicia, en el umbral pesará tu corazón contra una pluma, y si el corazón pesa más que la pluma no podrás cruzar el rio.
Aceptar los imprevistos, todo lo que no puedes controlar, como partes fundamentales del camino.
No olvides que nadie ha cruzado jamás la línea del horizonte.
No viajas hacia el Corazón del Misterio de la Existencia. El Corazón está aquí y ya te está moviendo.
En cierto sentido “ya llegaste”. En otro sentido “nunca llegarás”.
No te olvides, entonces, de respirar profundo y aceptar camino y destino.